Desde que tengo conciencia me he sentido perseguida por melodías y letras que aparecen de un modo insistente, a cualquier hora y en cualquier situación, soy capaz de evadirme de una conversación o situación persiguiendolas, porque ellas saben como atraparme y mantener toda mi atención. Intento que cada canción me haga volar, porque se que ellas pueden hacerlo. Tengo muchas ganas de aparecerme en cada rincón con mis nuevas canciones. Si algún día nos conocemos y no se de que me hablas, pide que te cante, seguramente tenga melodías tocando a mi puerta.