Cuando el mundo menos lo esperaba, Puerto Rico le regaló uno de los sucesos musicales más interesantes de nuestros tiempos. En su fulminante carrera, el sucio punk de Dávila 666 se convirtió en culto y leyenda celebrado por la crítica internacional. La banda se esfumó, pero el ruido de su legado resonó por todos los rincones del planeta. Mientras su nombre crecía en su ausencia, AJ Dávila, la delirante voz de esta revolución preparaba su siguiente gran paso. Como una nueva búsqueda sonora y espiritual nace AJ Dávila Y Terror Amor, el primer esfuerzo solista de este soldado del punk. A través de una nueva banda y persona, tomó el sonido con el que enamoró al underground y lo fusionó con el de los exponentes más destacados de la escena independiente en todas las latitudes de Latinoamérica. Tras girar por todo el continente con este disco, AJ Dávila llegó a México, donde además de un fanbase efervescente, encontró un nuevo hogar y una nueva comunidad de músicos para seguir construyendo su legado. Después de transformarse en una presencia obligada en la escena local, AJ Dávila llega a los estudios de Discos Panoram, donde junto a Sergio Acosta (Zoé), arranca una nueva etapa en su carrera, adecuadamente titulada: El Futuro. Juntos, este par dio vida a un nuevo disco en el cual el sonido emblema del boricua cobra nueva vida alcanzando dimensiones mucho más grandes que antes.