Soy Violeta, la música es para mi es cauce, medio, río. Desde muy chica empecé a tocar el piano, el canto siempre fue casi como una respiración, el nexo directo con la vida. La creación vino como fuente de una infinita posibilidad, como una casa llena de habitaciones donde hacer espacio. La palabra siempre al frente, como anclaje y ramaje, como quiebre y transformación. Las canciones que me tomaron el cuerpo, que dieron nombre y forma a ese mundo interno tan profundo e inmenso son las ofrendo en este espacio. La tensión entre opuestos, la búsqueda de sentido, la belleza de lo orgánico y la potencia del cambio. Mi más sincera y humilde entrega de este universo sonoro hacia ustedes. Los invito a escuchar con el corazón abierto para que todas las flores les retornen espejadas.