Yamir Antiman, es un rapero y poeta que compuso desde la cárcel varias canciones, entre ellos una canción inspirada en las vivencias de los padres y madres de chicos con trastornos del espectro autista (TEA), su labor es inspiración para muchos reclusos que no se encuentran salida para una mejor vida en sociedad. (Alfredo Srur) Haber acompañado a @yamir_antiman desde sus inicios en la música; mientras se encontraba privado de su libertad en plena pandemia, con la muerte acechando a la humanidad; fue una intensa experiencia de transformación, no solo para él sino para mi. Yamir estaba dejando atrás una parte de su vida, mientras atravesaba una de las situaciones más difíciles que le puede tocar a una persona: la pérdida de la libertad. Tenían que tenían y hacer música mientras vivían en algunos de los pabellones más violentos de las cárceles bonaerenses. La última vez que lo visité, uno de sus compañeros del pabellón me dijo: "Desde que estoy conviviendo con Yamir me cambió el ritmo de vida, pasó de las facas a pensar en grabar un videoclip o hacer una coreografía". Eso es política en estado puro, sin ninguna bandera partidaria y más allá de todo programa de reinserción social. Es inteligencia genuina, auto-organización y electricidad que conduce y une a las partes. Arte y necesidad de expresión, inventar un lenguaje nuevo, no contaminado por la vieja política ni por el arte contemporáneo, con los riesgos que genera un camino independiente.